Diversidad, biología, evolución, ecología, pesca, conservación, evolución, con especial atención a las especies presentes en Galicia.

jueves, 21 de abril de 2016

Visera flecha (Deania profundorum)

Foto: Rafael Bañón.

Visera flecha

Deania profundorum (Smith & Radcliffe, 1912)

(es. Visera flecha; in. Arrowhead dogfish.)

Orden: Squaliformes
Familia: Centrophoridae

La visera flecha es la tercera Deania presente en aguas de Galicia, junto con la D. calcea y la D. hystricosa. Hasta el 2009 este magnífico y misterioso tiburón era desconocido nuestras aguas, porque de manera sistemática se venía identificando, erróneamente, como como D. calcea¹, un hecho recurrente en diversas partes de su distribución, no solamente aquí.
     Es muy poco lo que se sabe de la Deania profundorum. Probablemente el trabajo más completo sobre su biología es el publicado por Ricardo Sousa et al. en 2009 a partir del estudio de un importante número de ejemplares muestreados en Madeira en 2004 y 2005², de ahí que lo hayamos tomado como base para este artículo, sobre todo en lo relativo a las tallas y reproducción. Aunque también incluimos los datos, más generales, que ofrecen las principales obras de referencia³.

Descripción. La D. profundorum es la única visera con quilla ventral en el pedúnculo caudal. Este es su rasgo morfológico más distintivo, claramente apreciable en la fotografía de arriba. Por lo demás, su aspecto es bastante parecido a las demás deanias. Presenta un larguísimo morro espatulado, característico del género, con narinas totalmente ventrales y transversas. La boca es arqueada, con grandes pliegues labiales.
A diferencia de la D. hystricosa, su piel es suave al tacto porque los dentículos dérmicos que la cubren, también en forma de tridente, tienen una cúspide pequeña, de 0,25 mm de longitud.
La primera dorsal es alta y relativamente corta, originada a la altura del borde interno de las pectorales, y la segunda un poco más corta pero más alta que la primera. Ambas presentan fuertes espinas acanaladas, la de la D2 mucho más larga que la de la D1. Sin aleta anal, como los demás Squaliformes. Las pectorales tienen forma trapezoidal, son pequeñas y redondeadas; las pélvicas son más pequeñas que la segunda dorsal.
Librea de color grisáceo oscuro pardo grisáceo más o menos uniforme. Las aletas muestran un tono ceniciento, oscuro.

Vista dorsal de la cabeza (foto: K. V. Akhilesh tomada de FishBase) y detalle de los dentículos (fuente: FAO).
Dentición. Dimorfismo dentario, como el resto de las viseras. Los dientes superiores no están imbricados, son cortos y rectos; en cambio, los inferiores sí están imbricados y son bastante más anchos.

Izquierda: Dientes superiores e inferiores. Derecha: Vista ventral de la cabeza. (Fuente: FAO)
Talla. Longitud máxima de 110 cm, correspondientes a una hembra capturada en Madeira. Muchos la consideran como la especie más pequeña de su género, con una longitud máxima de 97 cm (o alrededor de 104 cm, según la IUCN), si bien la gran mayoría de los registros no alcanzan esas tallas. Al nacer miden alrededor de 31 cm, según la cifra más aceptada. En Galicia el registro más pequeño fue una hembra de 25 cm y en Madeira, un macho de 27 cm.
     Los muestreos realizados en este archipiélago revelan, además, la existencia de un claro dimorfismo sexual: las hembras son más grandes que los machos y alcanzan la madurez con tallas superiores. Así, todas las hembras maduras medían entre 86-110 cm, mientras que los machos maduros entre 66-85 cm.
     Por lo demás, las cifras que figuran en la literatura indican que en general los machos maduran entre los 43-67 cm y las hembras entre los 62-80 cm.

Reproducción. Vivíparo aplacentario con saco vitelino. Basándose en el número de huevos fertilizados y de embriones hallados en el útero, se cree que las camadas son de entre 5-11 crías.
    Es probable que los taludes del archipiélago de Madeira constituyan una importante área reproductiva para esta especie, en el sentido más amplio. No solo por la abundancia de neonatos, sobre todo a partir casi de los 1000 m, lo que apuntaría a una zona de parto y de guardería. Las hembras resultaron ser más abundantes que los machos (hasta casi el doble) en todos los estratos de profundidad muestreados, excepto en un tramo medio comprendido entre los 451-1050 m, donde la proporción de ejemplares maduros de ambos sexos se igualaba, lo que, a juicio de Sousa et al., puede querer decir que es a esta profundidad donde podrían producirse los apareamientos. Todo lo anterior parece apoyar la hipótesis de una segregación espacial relacionada con la reproducción.

Foto: Rafael Bañón.
Dieta. A base de pequeños peces óseos demersales, incluidos los peces linterna, calamares y crustáceos.

Hábitat y distribución. Especie batidemersal de hábitos poco conocidos. Se encuentra en el talud superior continental e insular entre los 275-1750 m de profundidad (posiblemente más común en el borde más profundo de este rango); en el Atlántico NW entre los 412-617 m, mientras que en las Canarias se ha capturado entre 600-1500 m. En el banco de Galicia se han encontrado entre los 749-1079 m, y en Madeira a partir de los 150 m.
     En el mencionado trabajo, Sousa et al. (2009) han advertido indicios de una estratificación vertical por tallas. Todos los individuos inferiores a 40 cm se encontraron más allá de los 950 m, algo que también se ha detectado en otros tiburones de profundidad como el tollo raspa (Etompterus princeps) o el tollo negro (Centroscyllium fabricii). Esto podría deberse a que las hembras descienden hacia las zonas más profundas para dar a luz.

Elaboración propia.
Distribución mundial discontinua: Atlántico W (Virginia y Carolina del Norte, y Mississippi, en el Golfo de México), Atlántico E (Galicia, sur de Portugal, Azores, Madeira, Canarias, Sáhara Occidental, Mauritania, Nigeria, Gabón, Congo, Namibia y Sudáfrica; posiblemente Angola), Índico W (Sudáfrica -KwaZulu-Natal-, Walters Shoal, golfo de Aden), Índico N (mar Arábigo, al menos zona próxima a la costa SW de la India), Pacífico W (Filipinas).

Pesca y conservación. En principio de poco valor comercial, si bien se aprovecha fundamentalmente por el aceite de su hígado. Suele ser captura accidental de las artes de fondo, en particular el palangre. Como ocurre con otros tiburones de aguas profundas, suele confundirse con especies similares, de modo que la información de que disponemos sobre el volumen de capturas es escasa y, acaso, poco fiable.
     La visera flecha se encuentra a menudo formando grandes agregaciones, lo que aumenta el riesgo de sobreexplotación, dada su baja tasa reproductiva.
     De momento figura en la Lista Roja de la UICN con el estatus de Preocupación menor, si bien se recomienda la monitorización de las capturas.

Ejemplar fotografiado en la montaña submarina Tritón, al norte de las Canarias. Foto: OCEANA.
_______________________________
¹Véase Andrés Sanjuán, Alejandro de Carlos, Cristina Rodríguez-Cabello, Rafael Bañón, Francisco Sánchez & Alberto Serrano (2009). "Molecular identification of the arrowhead dogfish Deania profundorum (Centrophoridae) from the northern waters of the Iberian peninsula". Marine Biology Research, 8:9, 901-905. http://dx.doi.org/10.1080/17451000.2012.692160.
Igualmente el extraordinario trabajo de Rafael Bañón, Juan Carlos Arronte, Cristina Rodríguez-Cabello, Carmen-Gloria Piñeiro, Antonio Punzón & Alberto Serrano (2016). "Commented checklist of marine fishes from the Galicia Bank seamount (NW Spain)". Zootaxa, 4067 (3): 293-333. http://dx.doi.org/10.11646/zootaxa.4067.3.2.
²Ricardo Sousa, Sara Ferreira, Tomás Chada, J. Delgado & Dalila Carvalho (2009). "First approach to the biology of the deep-water shark Deania profundorum (Chondrichtyes: Centrophoridae)." Marine Biodiversity Records, vol. 2, e44, doi: 10.1017/S1755267209000554.
³Básicamente: 
-David A. Ebert, Sarah Fowler, Leonard Compagno, Marc Dando (2013). Sharks of the World: A Fully Illustrated Guide. Wild Nature Press, Plymouth. 
-David A. Ebert, Matthias F. W. Stehmann (2013). FAO Species Catalogue for Fishery Purposes: Sharks, Batoids and Chimaeras of the North Atlantic. FAO, Roma.
-David A. Ebert (2015). Deep-sea cartilagious fishes of the Southeastern Atlantic Ocean. FAO, Roma. 
-David A. Ebert, McCormack, C. & Samiengo, B. 2009. Deania profundorum. The IUCN Red List of Threatened Species 2009: e.T161551A5449518. http://dx.doi.org/10.2305/IUCN.UK.2009-2.RLTS.T161551A5449518.en. Consultado el 18 de abril de 2016.
-R. Froese & D. Pauly (Editors), 2016, FishBase, <www.fishbase.org/summary/SpeciesSummary.php?ID=672&AT=Ferreta>, consultada el 19 de abril de 2016.
He tenido en cuenta la bibliografía señalada en las notas anteriores y también: 
-K. V. Akhilesh, M. Hashim, K. K. Bineesh, C. P. R. Shanis & U. Ganga (2010). "New distributional records of deep-sea sharks from Indian waters". Journal of the Marine Biological Association of India, 52 (1): 29-34.
-Rui Coelho & Karim Erzini (2006). "On the occurrence of the arrowhead dogfish, Deania profundorum (Chondrichthyes: Squalidae), off Southern Portugal, with a missing gill slit". Cybium, 30(1): 93-96. En este trabajo se detalla el peculiar hallazgo de una hembra de 85,7 cm y 2,42 kg capturada por un palangrero de profundidad 16 millas al SW del cabo San Vicente a una cota de unos 530 m (el único registro de que tengamos noticia en aguas de Portugal). Tenía la particularidad de que en el lado derecho presentaba 4 aberturas branquiales en vez de 5.

lunes, 11 de abril de 2016

Fray Martín Sarmiento y las mielgas


Fray Martín Sarmiento (1695-1772) es una de las figuras más importantes de la Ilustración, en Galicia y en España, y también, probablemente, una de las más olvidadas. Erudito en los más diversos campos del conocimiento, desde las ciencias naturales particularmente la botánica hasta la historia, fue un firme defensor de la ciencia y del método científico frente a la ignorancia y la profunda superstición en las que estaba sumido el país. Como otros ilustrados, defendía la necesidad de elevar nuestro nivel cultural y científico mediante la educación y la investigación para acercarlo a las naciones más avanzadas de Europa. ¿Cómo era posible se lamentaba el buen benedictino que en las obras de los más insignes ictiólogos del momento faltasen referencias a nuestra abrumadora riqueza piscícola?
(2108) Para decir algo con los modernos, digo que Pedro Artedio en Ychthyologia, que sacó a luz Carlos Linneo, y a los quales copió M. Brisson, todos reconocen 14 especies de mielgas o galeos. Artedio las coloca debajo del género Squalus y Brisson debajo del nombre Canis Marinus¹. A cada especie agregan todos los nombres synonymos de varias naciones y los que se hallan en diferentes autores antiguos y modernos. En esa letanía de autores y de nombres vulgares no hace papel España, no por falta de pescados, no por falta de nombres vulgares, pero si por falta de escritores que los sepan y que los comuniquen a otras naciones. El caso es que hay pescados que, según la dibersidad de las costas marítimas de España, tienen dibersos nombres vulgares. Todos se debían recoger y formar una Ychthyologia polyg[l]ota de toda España.
     Aunque pasó buena parte de su vida en Madrid, Sarmiento mantuvo siempre vivo su vínculo afectivo con Galicia y, como buen amante de las lenguas, con el gallego, idioma que trató de dignificar y de normalizar defendiendo incluso su utilización en la escuela y en los actos y actividades religiosas por ser la lengua materna de la gran mayoría de la población. Durante sus viajes por el país (particularmente importantes fueron los de 1745 y 1754) logró compilar un inmenso caudal de voces y de expresiones del gallego que fue completando con numerosas noticias e información sobre su origen, uso y significado. Buena parte de esta ingente obra quedó inédita, y sus manuscritos fueron recopilados en diversos volúmenes que solo a finales del pasado siglo comenzaron a ver la luz convenientemente editados.

Centrina.
     Los textos que presento aquí pertenecen al segundo volumen de la conocida como Obra llamada de 660 pliegos que trata de historia natural y de todo género de erudición, con motivo de un papel... contra los foros y tierras que poseen en Galicia los Benedictinos, un compendio de páginas manuscritas realizado por el propio autor entre los años 1762 y 1766. Es de acceso libre y gratuito en la Biblioteca Digital Hispánica, el soberbio portal de la Biblioteca Nacional de España. Como es habitual, mantengo las grafías del original corrigiendo alguna errata, si bien, en aras de la claridad, actualizo la acentuación, la puntuación y el empleo de diversos signos ortográficos. Las ilustraciones pertenecen a la magna obra De piscibus marinus (1554), de Guillaume Rondelet, que el buen fraile parece haber consultado.


1. Pescados y tiburones. En sus escritos Sarmiento dedica un buen número de páginas a los peces: "Nunca pensé extenderme tanto sobre los pescados, pero hay tanta abundancia de ellos en España, hablando generalmente, y hablando particularmente en Galicia, que andaría muy corto en esta materia si no diese alguna noticia de los pescados y mariscos [...] que sirven y podrían servir para el comercio".
     Dentro de los "pescados sin escamas", donde figuran el congrio, la lamprea y la "murena", se encuentran los de "la clase de la mielga [...], los que son largos, redondos, sin escamas y con el pellejo muy áspero por lo común y, por lo común, sin espinas". Es decir, los tiburones, de los que va a tratar por extenso centrándose fundamentalmente en cuestiones léxicas, analizando el origen y significado de los nombres vulgares y buscando correspondencias con las especies de tiburón descritas por los científicos de referencia.

Galeo cane.
     Para introducir el tema, el fraile comienza destacando las bondades culinarias de la mielga para enseguida entrar en lo que le apasiona, las palabras: "Un bocado sanísimo para los enfermos, ya fresca, ya frescal, ya curada. Y es el plato más apetecido en Quaresma, pues aun seco no tiene sal. Y con razón admiro que, siendo la mielga un pescado tan conocido en España, y de España, no se halle aún en los bocabularios la voz "mielga" por el pescado, hallándose "mielga" por la planta mielga".
(2109) Sin salir del nombre squalus, que Artedio escogió para nombre genérico de las mielgas [...]. Al squalus de río llaman en Galicia escalo². Al squalus de mar llaman en Galicia tollo, rouxa, pinta rouxa. En Castilla, tollo, también lixa, pinta roxa, esqualo. En griego rhina, que significa 'lima', porque con su pellejo se lima, se alisa, o se alixa la madera y el marfil. En latín squatina, según Plinio: "Rhina, quam squatinam vocamus"³. Y en francés angelote, por la disposición de las aletas. En Galicia se quenta la pinta rouxa entre las mielgas, pero otros la agregan a las rayas y Artedio la hace 6ª especie del squalo.
Galeo acanthia.
2. Cuestiones léxicas. Sarmiento es un apasionado de las lenguas y las palabras, y se entrega gustoso a largas disquisiciones etimológicas y semánticas, algunas no siempre atinadas, y otras, acaso, rozando el disparate (a fray Martín a veces le pierden sus muchas lecturas, como a Don Quijote), como es el caso del término "mielga", que él utiliza genéricamente para designar todas las especies de tiburón:
(2100) No es fácil aberiguar el origen de la voz "mielga". En quanto planta, viene de Medica y Melica; pero en quanto pescado, sería atajo decir que también podría venir de Medica, no por la región de la Media, de donde vino la planta, sino por el adjetibo Medicus, Medica, aludiendo a que el pescado mielga es pescado de enfermizos y enfermos, y en algún modo medicinal. Esse origen y etimología podría[n] pasar, pues nada tiene[n] de inverosímil; pero yo soy de mal contento en estas materias y siempre deseo tropezar con un origen que no necesite el pegote de metáphoras y de alegorías, pues con esos pegotes voluntarios, quolibet fit ex quolibet. Quiero que el origen abraze la analogía de la lengua con la propiedad del significado.
Y a continuación emprende una profunda indagación que le lleva desde Plinio hasta Theodore Gazis, Rondelet e, incluso, nada menos que uno de los padres de la Iglesia, Papías de Hierápolis. A su juicio,
Es preciso que la combinatoria haga un grande rodeo, para probabilizar el origen de la voz castellana "mielga", o de la gallega melga, en cuanto significa el pescado tan conocido. ¿Quién lo creyera? Es preciso juntar perros, gatos, comadrejas y ratones, para decir algo con fundamento. De los nombres de estos animales se han valido los primeros que impusieron nombres a los pescados de la clase de las mielgas.
     Para resumir, dado el uso común de servirse de nombres de animales tan diversos como canis 'perro', con su diminutivo canicula, vulpes 'zorro', el griego gale 'comadreja' y su correspondiente latino mustella, etc. para bautizar las diferentes especies de tiburón "o galeos", Sarmiento cree razonable concluir que igualmente el compuesto migale o megala —del que derivaría la voz castellana "musgaño", sea el verdadero origen de las formas "mielga" y "melga", respectivamente. En su opinión, este vocablo estaría formado por las voces griegas mys 'ratón' y gale, "que pasó a significar 'el gato'", y su resultado latino sería la forma compuesta mus-aranea.

Canicula aristotelis.
3. De algunas variedades de "mielgas". Solucionadas estas cuestiones, nuestro fraile aborda el asunto de la diversidad de lo que él llama "mielgas" en aguas de Galicia, aunque no con el rigor científico necesario, como él mismo reconoce, sino desde el punto de vista de un viajero incisivo y curioso dotado de un amplio bagaje cultural y científico:
(2111) Estando yo en Galicia me informaron de algunas variedades de mielgas:
   1ª. La mielga ó melga, más común. Tiene sobre el lomo dos espolones, ganchos, uñas o espinas corvas.
   2ª. El melgacho, que es el macho de la mielga. Solo tiene un espolón; su comida tiene tufo.
   3ª. Cazón. No tiene espolón alguno. Es más grande que la mielga, pero de mala comida y con tufo.
   4ª. Cazacú. Llaman assí en Bayona a lo que en Asturias rañón. Es pequeña y no tiene espolón.
   5ª. Pintarrouxa. Es más grande que el cazacú. No tiene espolones. Dudo que sea la lixa.
   6ª. Canexa, y creo que mejor caneja. Especie de mielga distinta del cazacú, y que fresca es mejor que la mielga común, pero esta es mejor para curada.
   Véase aquí como para lo poco que por mí mismo he observado, no necesité de libro alguno.
(2112) Después consulté los libros para aberiguar los latines. La mielga acanthias tiene dos espolones, luego es la mielga común. De canicula se forma "cañeja", luego la cañeja es el galeo Canicula saxatilis. Centrum significa el espolón, y un Galeo cetaceo se llama por eso Centrina: tiene dos espolones en el lomo y se distingue de la acanthias en que esta pare los fetos vivos y la centrina solo pone huebos. El Canis maximus, Lamia, Carcharias, Tiburon y Requiem es la mayor mielga cetácea y también se llama Squalo. A este tenor se podrán hacer muchas combinaciones. Siendo el tollo especie de mielga, y habiéndole en Galicia y con esse nombre, es cierto que allí hay la Squatina.
Canicula saxatili.
4. Problemas en la identificación. Resulta muy difícil identificar correctamente cada una de estas especies, exceptuando la primera y la tercera, que en principio se corresponderían con el Squalus acanthias y el Galeorhinus galeus, respectivamente —ello si obviamos que en gallego el término cazón se aplica también a las musolas. La enumeración desordenada y asistemática de nombres comunes no facilita las cosas. Una misma especie recibe diferentes denominaciones dependiendo de la localidad o ámbito geográfico, que muchas veces distan entre sí apenas unos pocos kilómetros. A veces un mismo nombre puede (y suele) usarse para nombrar especies distintas, como casacú, roxa, pintarroxa, canexa, tollo, gata y un largo etc.
     Sarmiento se deja llevar por su erudición y dominio de las fuentes científicas, pero es evidente que le falta lo más importante: el conocimiento de la materia, lo cual le permitiría deslindar de algún modo el alcance de cada uno de los nombres comunes. Aunque, para ser justos, debemos reconocer que una problemática similar se da en autoridades científicas de la talla de Linneo, quien, por poner un ejemplo, distingue dos especies que en realidad son una y la misma: el Squalus canicula y el Squalus catulus de su catálogo son sinónimos de la pintarroja (Scyliorhinus canicula, según la nomenclatura actual).¹⁰

      El llamado cazacú podría referirse a S. canicula, y, por la referencia a su mayor talla, la pintarrouxa se correspondería con el alitán (Scyliorhinus stellaris), que Rondelet, por cierto, denomina Canicula saxatili (la propia ilustración, que reproduzco arriba, habla por si sola). Sarmiento se confunde al aplicarla al S. canicula, que, en la obra del naturalista francés se recoge como "Canicula Aristotelis".
     La voz canexa, si bien en algunos lugares se usa para S. canicula, como en portugués (caneja), y también, incluso, para S. stellaris, podría estar referida en realidad a una musola (Mustelus sp.). Se describe como una "mielga distinta del cazacú" y cuya carne es en fresco mejor que la de la mielga común. Se trata de una especie tan común en las zonas costeras que parece difícil olvidarse de ella. El propio Rondelet recoge en su obra las dos variedades más frecuentes de las aguas europeas, M. mustelus y M. asterias (Galeo laevi y Galeo asterias, respectivamente).

Galeo asteria.
     Y nos queda el melgacho, voz con la que en muchas áreas de Galicia se se conoce el S. canicula. Los datos que nos ofrece el fraile son extraordinariamente desconcertantes y hacen imposible la identificación. Por un lado, si en efecto considera que es "el macho de la mielga" no procedería tratarlo como especie diferente de ésta, sino incluirlo en el mismo apartado. Por otro, no hay ninguna especie de presencia común en la costa que cuente con una sola espina en las dorsales ("solo tiene un espolón"). La impresión es que nuestro autor se limitó a recoger de forma acrítica las noticias que le iban allegando los paisanos con los que hablaba.

     En cuanto al resto de especies que nuestro fraile ha encontrado entre sus "latines", el Centrina, citado por Rondelet, Linneo y otros, es sin duda el cerdo marino (Oxynotus centrina) que no es una especie ovípara, como se creía, sino vivípara aplacentaria; y de los nombres de las demás especies de "Galeos cetaceos" cetaceo debe entenderse aquí como "de gran porte", por lo que no procede aplicarse al Centrina, parece evidente que el Squalus o Canis carcharias, también conocido desde la antigüedad como Lamia, es el gran tiburón blanco (Carcharodon carcharias). Las voces Tiburón y Requiem pueden incluir algunas de las especies que Rondelet, Artedio y Linneo citan en sus obras, como el zygaena (Sphyrna zygaena) o el Galeus glaucus (Prionace glauca). Quién sabe.

Galeo glauco.
     Si el fuerte de fray Martín Sarmiento hubiese sido los tiburones y no la botánica, el resultado de sus investigaciones habría sido sencillamente espectacular, desde todos los puntos de vista. En cualquier caso, pese a todas sus imprecisiones, estamos ante una de las primeras fuentes de la ictiología en Galicia, y debemos valorarla como se merece.

___________________________
¹Peter Artedi o Petrus Arctaedius (1705-1735), considerado por muchos el padre de la ictiología, fue un insigne ictiólogo sueco, amigo íntimo de Linneo (1707-1778), quien, efectivamente, se encargó de la publicación póstuma de sus obras.
Mathurin Jacques Brisson (1723-1806) fue un insigne zoólogo francés y profesor de filosofía natural.
²Se refiere al bagre o escalo (Squalius cephalus), un ciprínido de agua dulce. Nada tiene que ver, por tanto, con los escualos.
³"Rhina, a la que llamamos squatina".
Es evidente que Sarmiento se pierde y se hace un lío entre tanta profusión de nombres comunes, algunos simples variedades geográficas referidas a la misma especie. La voz pinta rouxa, por ejemplo, que aquí usa como sinónimo del angelote (Squatina squatina), más adelante se aplica al alitán (Scyliorhinus stellaris). En otro momento se refiere al Squatina como "lixa".
Por otro lado, efectivamente, la 6ª especie de Squalus que recoge Artedi es la Squatina (véase Genera piscium, en Ichthyologia sive opera omnia de piscibus, 1738), la cual Rondelet, en efecto, incluye en el grupo de las rayas y torpedos (Libri de piscibus marinus,1554, Libro XII), junto con el Rhinobato al que alude el fraile de forma tan confusa.
MELICA en latín vulgar, MEDICA, latín clásico.
"De cualquier cosa se sigue cualquier cosa".
Para Plinio el Viejo (23-74 d. C.) véase Los tiburones según Plinio. Theodore Gazis o Teodoro Gaza (c. 1398-c. 1475) fue un humanista griego y apreciado traductor de Aristóteles, entre otros muchos autores clásicos griegos y romanos. Guillaume Rondelet (1507-1566), médico y naturalista francés, es una de las grandes figuras históricas en el campo de la ictiología.
En realidad, según explica Joan Corominas, esta palabra "deriva probablemente del latín MERGA 'horca para levantar las mieses'; la l castellana se debe al influjo del sinónimo bielda, bieldo, de donde las formas intermedias bielgo y mielgo. Como nombre de pez, 1335, parece ser aplicación figurada de este vocablo, por comparación de los dos aguijones duros o aguzados que lo caracterizan con las púas de un bieldo." (Breve diccionario etimológico de la lengua castellana. Madrid, Gredos, 1961).
No debió de quedar muy satisfecho con todo esto el obstinado fraile, pues todavía volvería sobre el tema hacia el final de este tratado sobre los tiburones:
(2113) El pellejo de toda mielga es áspero y duro, y, más o menos, podrá servir de lixa. Toda mielga se debe desollar para comerse. En Cathaluña llaman "gatos" a los melgachos, y todo viene de gale, 'gato' o 'comadreja' [...] He discurrido si acaso la voz "mielga" es recortada de la voz entera tre-mielga, que significa la raya torpedo, pues las rayas y las mielgas se suelen confundir, como se ve en la squatina o lixa; o si acaso es recortada de la voz remeligo, que significa la rémora o echeneis, que los que creen la existencia dela rémora la suponen como lamprea o murena. Y no hay duda que la estructura de la mielga se parece a la de los dos pescados.
La palabra "tremielga" es un compuesto con la voz latina tremere, 'temblar', por el efecto de la descarga eléctrica que pueden producir estos bichos. 
El "remeligo" es efectivamente la rémora, género Echeneis (fam. Echeneidae). En los bestiarios medievales figuraba el echeneis como un pequeño pez que se anclaba a los navíos y era capaz de frenar su marcha incluso bajo los vientos más fuertes.
¹⁰Véase Carolus Linnaeus (1758). Systema Naturae per regna tria naturae, secundum classes, ordines, genera, species, cum characteribus, differentiis, synonymis, locis. Editio decima, reformata. Laurentius Salvius: Holmiae. ii, 824 pp.